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Nuestra historia y nuestros valores

1889

Corría el año 1889 en Puebla de Trives, una pequeña aldea de montaña en la Galicia española. Allí, José Salgado ponía en marcha su molino de cacao, impulsado por el río Cabalar, torrente que se convertiría en socio generoso de sus futuros emprendimientos industriales.

 

1910

1918

1920

En el año 1920, el rey Alfonso XIII le otorga a la empresa el título de "Proveedor de la Real Casa de España", dando comienzo a una etapa de alto prestigio y notoriedad en nuestro país. Buscando mantener un estándar de calidad ambicioso la empresa participa y obtiene importantes premios en salones de Milán, Barcelona y Florencia a mediados del siglo pasado. 

1950s y 60s

2005

1970s y 80s

Al año de su lanzamiento Tres de nuestros chocolates amargos de origen unico han sido recientemente calificados con la mas alta distinción (GOLD) - en el prestigioso concurso Great Taste Awards en Londres, Reflejando que la calidad sigue siendo nuestra obsesión, asegurada día a día mediante la inalterabilidad de nuestras formulas originales y la constante utilización de materias primas nobles y genuinas.

2006

2011

2017

Décadas mas tarde, la corriente progresista de la época lo llevaría a nuestro fundador a cruzar el Atlántico. Cargando en su equipaje las mezcladoras de chocolate y molinos de cacao, arriba al Puerto de Buenos Aires un 6 de agosto de 1910, donde tiempo después en 1918 inauguraría el edificio de nuestra actual fábrica en el barrio de Constitución.

La empresa disfruta durante años de éxito tanto en el mercado de consumo masivo como en el mercado de materia prima lanzando diferentes chocolates para taza, blanco, amargo, con almendras y maní

En las décadas del 70 y 80 Fenix se focaliza en el mercado de materia prima desarrollando una gran cantidad de productos con formulaciones específicas por aplicación.

En el 2005 se lanza la colección Salgado Grands Crus en honor a nuestro fundador. Integrado por 5 granos de cacao de diferentes orígenes de latino américa fue la primera colección de chocolates de orígen de argentina y tuvo una gran aceptación entre los más reconocidos chefs del país

En el 2011 abrimos las puertas de nuestro Chocolab. Un ámbito de aprendizaje equipado con la última tecnología europea en chocolatería y pastelería. Los laboratorios estan a cargo de profesionales reconocidos y son principalmente prácticos para que los participantes sean los protagonistas.

En el 2017 ampliamos nuestra oferta de chocolates de origen único agregando la colección "amazónicos" con los varietales Apumirac, Moxos y Napo originarios de la cuenca amazónica de Ecuador y Peru.

2018

Hoy, más de cien años y cuatro generaciones después de aquella primera aventura, continuamos fabricando nuestros chocolates con el mismo espíritu artesanal y emprendedor de nuestro fundador. 

Nuestros valores

 

Somos una empresa familiar, con un importante respeto por la tradición, pero no por ello estamos desatentos a las nuevas necesidades y tendencias que requiere un mercado cada vez mas exigente y cambiante. Nuestra visión de lo que representa un producto fabricado con calidad tiene una dimensión amplia, donde se le presta atención no solo a las propiedades organolépticas del producto sino también a los valores sociales y ecológicos que reúne. 

 

Pasión por el Gusto

 

Convencidos de la importancia que tiene partir de ingredientes superiores, nos comprometemos a adquirir las mejores materias primas disponibles. En el marco de esta filosofía, le destinamos a nuestro ingrediente principal un cuidado especial. Creemos en la importancia de solo utilizar cacao “fino o de aroma”, controlando calidad, genotipo y origen, seleccionándolo en distintas plantaciones de Brasil, Ecuador, Venezuela, Perú y Bolivia. Esto se suma a la necesidad de un tostado óptimo y personalizado como clave para el correcto desarrollo de aromas en un chocolate superior.

 

 

Preferencia por lo Ecológico y Natural

 

El cacao es un pequeño árbol que requiere de sombra natural para su desarrollo, y es por eso que suele ser promovido por ciertas ONGs en regiones de nuestro continente donde la deforestación pone en riesgo el equilibrio del ecosistema. Asimismo, suelen ser proyectos donde el cacao crece en forma natural (orgánica). Ponemos prioridad en comprar nuestro cacao a través de estas organizaciones.

 

Conciencia Social

 

El pequeño campesino sudamericano que cultiva cacao vive en zonas con escasos recursos y alejado de los mercados principales. Nuestra filosofía es la de procurar achicar esa distancia, evitando intermediarios innecesarios de forma tal que el productor reciba un valor justo por su trabajo y esfuerzo. Por ello, tampoco utilizamos cacao originario del África, no solo por su escaso valor aromático, sino también por los riesgos sociales que ello implica, dada la prevaleciente esclavitud y trabajo infantil utilizados en sus cultivos 

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